Una de los factores diferenciales que sin duda alguna ha animado a muchos de los vecinos de Valdemoro a instalarse aquí ha sido su amplia y diversa oferta educativa. Nuestro municipio cuenta con un total de más de cuarenta centros educativos que abarcan desde la educación temprana o preescolar hasta la educación superior no universitaria. Además, en cada etapa del proceso educativo de los jóvenes de Valdemoro, los padres pueden elegir qué tipo de educación ofrecen a sus hijos, pues en las diferentes fases existen centros públicos, concertados y privados.
En este noveno número de La revista de Valdemoro nos acercaremos para conocer más de cerca el centro educativo más antiguo de la localidad, la Escuela Comarcal Arzobispo Morcillo. Con sus 53 años de historia, la ECAM ha ofrecido formación a múltiples generaciones con el fin de conformar una sociedad preparada para afrontar la vida profesional y contribuir con su trabajo al enriquecimiento de la zona.
A través de este reportaje conoceremos de cerca esta institución y sus claves para mantenerse en activo durante tantos años. La ECAM también cuenta con un rasgo diferenciador muy importante: su trabajo con alumnos con problemas de fracaso escolar y problemas socio-familiares. Como veremos, la relevancia de este centro no reside solo en su oferta educativa, sino también en cómo repercute su actividad en la sociedad valdemoreña.
Creciendo con Valdemoro
La Escuela nace en 1963, por iniciativa de un grupo de párrocos, alcaldes y algunos industriales para dar respuesta a las necesidades formativas de Valdemoro. En octubre de ese año, cuarenta alumnos comenzaron a forjar su porvenir y el de la Escuela, con dos aulas y un taller de ajuste y torno que se constituyeron como una filial en Valdemoro de Loyola Aranjuez.
La labor del centro interesó a Cáritas Diocesana de Madrid, que asumió la titularidad y movió voluntades para que conociera esta incipiente obra el arzobispo don Casimiro Morcillo. Así, en 1964, visita el centro y la Escuela es bendecida y bautizada con su actual nombre: Escuela Comarcal Arzobispo Morcillo. Un año más tarde, en 1965, el Ministerio de Educación reconoce a la ECAM como centro no oficial de formación profesional.
Debido a la elevada demanda de alumnos y las necesidades productivas de la comarca, se amplía la oferta formativa a la especialidad de tornero e instalador de la rama eléctrica, en el grado de aprendizaje que ya contaba con la especialidad de ajustador de la sección mecánica de la rama del metal.
En 1967, la entonces princesa doña Sofía visita la Escuela y gracias a ella se obtiene un importante donativo que junto a otras subvenciones sirvieron para demoler los locales donde se iniciaron las clases y construir en las décadas de los años setenta y ochenta el pabellón Zina Günter y Manuel Goicolea, así como aulas y talleres docentes. De tal forma que se ampliaron las especialidades a delineación y automoción, electricidad y electrónica.
La mejora en sus infraestructuras permitió que a partir de la mitad de los años setenta se ofertaran diferentes especialidades de las antiguas FP1 y FP2 en las ramas de metal, electricidad, electrónica, delineación, automoción y administrativo comercial. En la década de los noventa se transforman en ciclos formativos de grado medio y grado superior y a finales de esta década se crean los primeros programas de garantía social para alumnos desfavorecidos.
Recién estrenado el siglo XXI, en el año 2000, Cáritas Madrid le cede la titularidad del centro y sus infraestructuras a Cáritas Diocesana de Getafe, quien asume la titularidad de la Escuela. En 2007 cambia el equipo directivo del centro y accede a la dirección el actual, iniciándose una gran transformación en todos los órdenes y el camino hacia la excelencia.
Garantía en educación de calidad
La Escuela Comarcal Arzobispo Morcillo es un centro de carácter privado-concertado, propiedad, como ya hemos mencionado, de Cáritas Diocesana de Getafe. Actualmente, en sus aulas, se imparten ciclos de grado medio, ciclos de grado superior, formación profesional básica y aulas de compensatoria educativa. Además, el centro imparte certificados de profesionalidad en colaboración con la Consejería de Empleo y cursos para preparar el acceso a ciclos formativos de grado superior y medio.
Su ámbito educativo de acción es lo que generalmente conocemos como formación profesional. Esta oferta educativa se ha planteado siempre como una alternativa a la formación superior universitaria. En este aspecto reside una de las claves del éxito de la Escuela y de su larga trayectoria en nuestro municipio.
Su dilatada experiencia en la formación profesional convierte a la ECAM en un centro educativo que ha sabido adaptar su docencia a las diferentes fases que esta vía educativa ha tomado a lo largo de estos más de cincuenta años. La concepción de la formación profesional ha ido evolucionando y calando en nuestra sociedad de manera que hoy en día se plantea como una alternativa de calidad en la formación de los jóvenes.
En los últimos años la formación profesional ha sufrido una gran transformación que ha llevado a los jóvenes a elegirla por delante de otras ofertas educativas. La formación profesional actual tiene por objeto no solo la preparación de profesionales cualificados para el desempeño de diversas profesiones, sino que pretende preparar a los jóvenes para una participación activa en la vida social, cultural y económica.
Para ello se pretende dotar al alumno de habilidades consolidadas tanto para el trabajo individual como para el trabajo en equipo, este último cada vez más demandado en el mundo empresarial. Las habilidades aprendidas en la Escuela se ven aplicadas gracias a las prácticas en empresas de los ciclos formativos. La ECAM cuenta con más de quinientos convenios con empresas del entorno y grandes empresas.
Para la ECAM, la formación profesional actual no solo debe centrarse en el aprendizaje de competencias profesiones, sino que tiene que aportar un valor añadido. Este reside en una formación global en la que se destaca la adquisición de competencias personales y sociales que permitan la consolidación de hábitos de disciplina, responsabilidad y liderazgo, además de valorarse la capacidad de autoaprendizaje y crítica profesional.
Dentro de su programa educativo se encuentran valores que refuerzan la formación integral del alumno; desde el desarrollo de conocimientos y destrezas técnicas gracias a innovación en los métodos y contenidos educativos como la pedagogía activa, creativa y personalizada hasta el desarrollo de valores humanos, fomentando la tolerancia y respeto entre los miembros de la comunidad educativa o la preocupación por los bienes ecológicos, educando en un nuevo estilo de vida.
Como responsables de esta tarea se encuentran cuarenta docentes, en formación continua, encargados de ofrecer un aprendizaje adecuado a las aptitudes, necesidades, motivaciones e intereses de los alumnos. Además, los alumnos disponen dentro de su programa educativo de un programa de orientación académica y profesional con el fin de solventar aquellos problemas que surjan en el transcurso de su formación.
El alumnado que forma parte de la Escuela es muy diverso y varía en función del nivel educativo. Las edades comprenden desde los 15 hasta los 25 años, sin tener en cuenta la formación para el empleo donde el perfil es heterogéneo. Como característica común, los alumnos proceden de la zona sur de Madrid, principalmente de nuestro municipio y ciudades próximas como Pinto, Ciempozuelos o Aranjuez, entre otras. En su mayoría se trata de varones (75%) y en general tienen un nivel socioeconómico medio-bajo.
Integración con el entorno
Una de las áreas de acción más importantes de la ECAM, reflejo del ideario de Cáritas, es su esfuerzo educativo a favor de personas y colectivos desfavorecidos. La Escuela ejerce en este ámbito una opción social que cubre necesidades no atendidas por otras instituciones. Dentro de su oferta educativa cuenta con dos ciclos (Aulas de Compensatoria Educativa y Formación Profesional Básica), orientados a alumnos entre 15 y 17 años con historia de fracaso escolar, sin titulación en secundaria y muchos con problemas de comportamiento y adaptación y problemas socio-familiares.
Gracias a estos ciclos formativos se ofrece una oportunidad a estos alumnos para que puedan continuar sus estudios o, por el contrario, incorporarse al mundo laboral. Gracias a su programa educativo, no solo se trabaja para la obtención de la titulación, sino que se fomenta el interés y la búsqueda del éxito académico con el fin de recuperar la ilusión y motivación del estudiante.
La atención específica a alumnos con dificultades educativas y de integración social es uno de los compromisos que la Escuela tiene con su entorno. Junto a este, la ECAM también trabaja por la inserción laboral para desempleados a través de la formación académica y profesional; así como en el desarrollo de diferentes proyectos sociales que contribuyen al bienestar social. Por último, la estrecha relación con las empresas del entorno favorece la economía y el empleo de la comunidad.
La Escuela Comarcal Arzobispo Morcillo se conforma como el centro educativo más antiguo de Valdemoro. Su larga trayectoria en la formación profesional les permite abordar la educación desde una perspectiva completa que garantiza la formación integral del alumnado. Su carácter social no sólo ofrece una oportunidad a aquellos jóvenes que han crecido en un ambiente difícil, sino que forma ciudadanos gracias a los valores que están impregnados en sus programas educativos.
Además, la ECAM trabaja para que su centro cuente con una gestión interna innovadora y eficiente. La calidad de su enseñanza queda reflejada en el certificado ISO 9001 que poseen desde 2008 y en el trabajo que han estado realizando desde el prestigioso modelo de excelencia europea EFQM que ha sido reconocido con la obtención del sello + 400. También llevan a cabo diferentes proyectos internacionales como el Proyecto Erasmus para el intercambio de alumnos y profesores.
En su labor de compromiso con la sociedad, han desarrollado diferentes iniciativas como el Proyecto TIC, donde alumnos de la Escuela, formados en la prevención del mal uso de las nuevas tecnologías, acuden a colegios del municipio; o el Proyecto Regala Ilusiones en el que estudiantes de ACES han colaborado con la Institución Vicente Ferrer en la recogida y entrega de juguetes para niños necesitados.
Por todo ello la ECAM no solo es un centro formativo de jóvenes. Su labor para con la sociedad es muy importante y a través de diferentes iniciativas tratan de transmitir valores sociales y humanos desde una visión cristiana del hombre y del mundo. Esto sin duda alguna se impregna en los jóvenes, creando ciudadanos más sensibilizados y responsables socialmente.
Para más información puedes acudir a sus instalaciones en la calle Estrella de Elola, 10; visitar su página web www.ecamfp.es o ponerte en contacto a través del teléfono 91 895 01 16 o en la dirección de correo ecamfp@ecamfp.es.
Texto_Sergio García Otero
Fotografía_Edwind Orlando, Ncuadres
