Educar a los hijos es una tarea compleja y que, sin duda, resulta más sencilla cuando se tiene una red social que apoya en la crianza.
En este sentido, la relación familia-colegio desempeña un papel muy importante tanto en el desarrollo académico como en el social y emocional de los niños y niñas. Una comunicación efectiva entre la familia y la escuela crea un puente sólido que facilita su crecimiento integral.
Una colaboración abierta y constante beneficia a toda la comunidad educativa, creando un espacio de confianza y cercano en el que todas las partes se sienten involucradas y comprometidas. Este ambiente propicia una mejora del rendimiento académico e impacta directamente en el bienestar emocional de los alumnos y alumnas.
En un entorno en el que la comunicación es fluida, se pueden identificar de manera efectiva y temprana todas las posibles dificultades que los niños y niñas puedan encontrar durante su etapa escolar. Si las familias y el equipo docente comparten información de forma natural y sencilla como parte del proceso de la educación, se puede abordar rápidamente cualquier obstáculo.
Cuando las familias y el centro comparten una misma visión a la hora de educar, se asienta el sentimiento de pertenencia y ambas partes aúnan sus esfuerzos en pro de lo esencial, que son los alumnos y alumnas. El respaldo compartido de familia y escuela crea una red de apoyo mutuo que contribuye a fortalecer notablemente su autoestima.
La comunicación es esencial, ya que cada peque es único, y solo mediante el diálogo entre todos los que formamos parte de su desarrollo podemos conseguir adaptar la educación a sus necesidades individuales, conocer sus habilidades y fortalezas para potenciarlas y apoyarles en sus desafíos.
Para mejorar la comunicación con el colegio, podemos llevar a cabo diferentes acciones:
- Mantener una actitud abierta, cercana y receptiva hacia los profesores y el resto del personal del centro.
- Asistir a las reuniones para conocer los objetivos académicos, compartir nuestras inquietudes como madres y padres y recibir información sobre el progreso académico de nuestro hijo o hija.
- Participar con nuestros hijos e hijas en las actividades que organiza el cole, compartiendo tiempo con otras familias y creando lazos para sentirnos parte de la tribu.
- Crear entornos de aprendizaje comunes, estableciendo objetivos claros y alcanzables para nuestro hijo o hija.
- Reconocer sus logros y esfuerzos promoviendo un ambiente positivo en casa y haciendo partícipes de ellos.
Mantener un contacto directo y natural con todos los miembros de la comunidad educativa conseguirá que te sientas realmente parte del colegio, con la tranquilidad que proporciona sentir que están como en casa, en familia.
Departamento de Orientación del Colegio Nobelis
