El valdemoreño se alza con el título tras un contundente KO en el cuarto asalto
Rubén Hernández se ha proclamado campeón del mundo profesional de K-1 tras vencer al mexicano Alejandro Castillo en una intensa pelea disputada la noche del sábado 26 de abril. El combate, pactado a cinco asaltos de tres minutos, se celebró con un ambiente cargado de expectación, ya que Castillo llegaba como actual campeón de México y con un estilo poco convencional, además de ser zurdo, lo que obligó a Rubén a estar especialmente concentrado desde el primer minuto.
A pesar de las dificultades, Hernández dominó el combate desde el inicio, ganando asalto tras asalto con firmeza. El desenlace llegó en el cuarto asalto, cuando logró conectar un potente gancho de derecha que dejó sin respuesta a su rival, firmando así una victoria por KO que le dio el cinturón mundial de la IMTF en esta modalidad de kick boxing de contacto pleno.
Lejos de quedarse en la celebración, Rubén ya tiene claro su próximo paso: centrarse plenamente en sus alumnos y en su escuela. «Ahora quiero dedicarme al cien por cien a ellos, tanto a los que compiten como a los que vienen a aprender y mejorar», ha afirmado tras la victoria.
La jornada del sábado también dejó otro motivo de alegría para el equipo de Hernández: por la mañana, dos de sus pupilos, Iván Benítez y Rayan Mamar, se proclamaron campeones de Madrid en K-1, confirmando el excelente momento del club.
Con este título mundial, Rubén no solo se gana el reconocimiento internacional, sino también una plaza para el campeonato mundial que se celebrará en Japón en 2026. Un nuevo reto en el horizonte para un luchador que combina talento, trabajo y humildad en cada paso que da.
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